lunes, 11 de febrero de 2008

Sweeney Todd: el sangriento musical de Tim Burton

A estas alturas todos sabemos de las rarezas del genial director Tim Burton , un tipo alejado de la filosofía comercial hollywoodiense, que, sin embargo, ha conseguido que su particular estilo cinematográfico llegue a un público muy diferente, convirtiendo en "taquillazos" auténticas obras de culto.

Por todos es conocido, también, el talento y la versatilidad del polifacético Johnny Depp, capaz de recrear al pirata rasta más famoso del cine contemporáneo, al director más penoso del mundo, a un mágico ser con tijeras en vez de manos, a un excéntrico fabricante de chocolate o a un aprendiz de mafioso junto a Al pacino con la misma facilidad que se cambia de sombrero. Es de los mejores actores que el cine nos ha dado, capaz de salvarle la función al mismísimo Roman Polanski en la pésima "La novena puerta".

¿ Que puede surgir de este tandem en su sexta colaboración hasta la fecha?, una nueva vuelta de tuerca al gótico y encantador universo de Burton y un nuevo reto en la impecable carrera de Depp. Un musical basado en la historia del tétrico y atormentado barbero Sweeny Todd que ya ha tenido otras versiones cinematográficas y teatrales.

La película cuenta, en clave de musical casi en su totalidad, la historia de un noble barbero (Deep) expulsado de su país por un juez (Alan Rickman) que quiere quedarse con su mujer y la hija de ambos, y que regresa 15 años después convertido en un maquiavélico ser dispuesto a vengarse, de aquellos que le arruinaron la vida, ayudado por una pastelera (la excéntrica Helena Bonham Carter) de "extraños" métodos culinarios y enamorada de Sweeney en secreto.

Los personajes que pueblan esta fábula sobreviven en un mundo corrupto en el que sacrificarán su moralidad para cumplir sus objetivos y sus (turbios) deseos acabando (literalmente) con todo aquel que se ponga en su camino. La labor de los actores (destacando las actuaciones de Deep, nominado al Oscar y del jovencísimo Ed Sanders) es magistral, y la ambientación es mágica con escenas cuidadosamente filmadas y de esa lúgubre belleza tan característica en el cine de Burton (atentos a los títulos de crédito y al espléndido final).

Quizás, lo peor de la cinta sea la pareja de adolescentes, formada por el debutante Jamie Campbell Bower y Jayne Wisener (que recuerda mucho a la Christina Ricci de Sleepy Hollow), que , sin embargo, destacan en la faceta musical. Lo mejor, con permiso de Deep, Toby (Ed Sanders) el niño compañero de andanzas del barbero y la pastelera, que encarna a la perfección la inocencia en un mundo caótico y cuyo único deseo es sentir un poco de afecto.

Como siempre, es un placer volver a ver a Johnny Deep en manos de su mentor y amigo Burton, deseando que no sea la última vez que se embarquen en un proyecto que nos haga soñar como ocurrió con "Eduardo Manostijeras" o que nos haga tener (sangrientas) pesadillas como este "Sweeney Todd: el barbero diabólico de la calle Fleet"

lunes, 4 de febrero de 2008

Monstruoso: un Godzilla neoyorquino

Lo primero que te asalta a la cabeza cuando vas a ver esta película es por que tiene un título tan horrible, y por que en España siguen haciendo esas "traducciones", por llamarlo de alguna manera, tan libres a los títulos en versión original. Si consideran que no hay traducción pues se inventan el título directamente.

El título original de esta cinta, dirigida por Matt Reeves y producida por J.J Abrams el creador de la fabulosa Lost (Perdidos), es "Cloverfield" que es el nombre que el Gobierno estadounidense daría a una catástrofe que arrasara New York, ya se sabe del gusto de los americanos por ponerles nombre propio a las catástrofes, pero se ve que "Cloverfield" tendría menos tirón comercial que "Monstruoso".
Tirón comercial es algo de lo que sabe mucho J.J Abrams, con la campaña que ha hecho a través de internet antes del estreno de la película ya se aseguraba un éxito total de taquilla. Pero ha hecho una campaña inteligente, por ejemplo, introduciendo en la red vídeos de falsos noticieros donde se informaba de ataques a una base petrolífera y lo más importante, mantener en secreto el aspecto del monstruo hasta el estreno del film jugando con la curiosidad del respetable y creando mucha expectación.

¿Que nos encontramos cuando por fin "picamos" y vamos a ver la película?. La película, de las de "cámara en mano" como el "Proyecto de la bruja de Blair" o más recientemente la terrorífica "Rec", nos sitúa en la isla de Manhattan durante una fiesta de despedida que unos amigos organizan al protagonista por que ha aceptado un buen cargo en una compañía en Japón, país que vio nacer a Godzilla.
Mucha gente joven, una historia de amor, algo vista ya, y el típico torpe grabando todo lo que sucede. Aunque se agradece que los actores no sean conocidos, que sumado al "rollo videograbación casera" dan más sensación de realismo, pero son algo planos y su historia no interesa mucho.

Pero a partir del primer ataque del extraño ser empieza el verdadero espectáculo. Desde ese momento la sensación de horror, devastación, caos y pánico ante lo desconocido, con unas impactantes imágenes que nos recuerdan a cierto acontecimiento real ocurrido recientemente, traspasa la pantalla y se apodera del espectador en momentos verdaderamente escalofriantes, sobre todo en las contadas apariciones del monstruo que tiene un diseño impecable.

En algunas (inverosímiles) situaciones no entiendes ciertas reacciones de los protagonistas, pero por otro lado en muchos momentos el espectador se ve , como ellos, sumido en la incertidumbre ¿qué los ataca? ¿de dónde ha salido? ¿que quiere?, preguntas que quedarán sin respuesta; aunque ya se rumorea en algunos foros que se ha dado luz verde a una segunda parte que podría responder a esas preguntas y quien sabe, teniendo en cuenta el toque Abrams, si plantear otras.

jueves, 31 de enero de 2008

XXY: La búsqueda de la identidad sexual

El "Sistema de Determinación XY" enuncia que un varón tienen el cromosoma sexual XY y una hembra el XX, pero a veces se pueden dar los dos en un sólo individuo, lo que se denomina intersexualidad.

Bajo esta premisa debuta la escritora Lucía Puenzo en la dirección presentándonos la historia de una adolescente hermafrodita de 15 años, que vive con sus padres en un pequeño sitio de Uruguay, en busca de su identidad sexual (y física) que ganó el Gran Premio de la Semana de la Crítica en la pasada edición del Festival de Cannes.

Esta coproducción entre España, Argentina y Francia, basada en un cuento de Sergio Bizzio, gira en torno a Alex (enigmática Inés Efron y ambigua hasta en su nombre) y su lucha por saber quien es y, sobre todo que es. Todo se complica con la llegada de unos amigos de sus padres y de Álvaro ( Martín Piroyansky), hijo de éstos, que estará al lado de Alex compartiendo el despertar sexual y la búsqueda de identidad. Ambos protagonizan escenas llenas de ternura y de confusión que ayudan al espectador a entender el calvario que sufren.

Aunque el sufrimiento, presente en buena parte de la película, se ve muy bien reflejado en los padres de Alex, sobre todo en Ricardo Darín (contenido en un papel muy alejado de sus trabajos anteriores) y su mirada, inquieta ante el futuro incierto de su hija a la que ama por encima de todo el rechazo que provoca a su alrededor.

A pesar de todo es una película esperanzadora, con unas buenas actuaciones, en la que entiendes que se puede ser amado por muy extraordinario que se sea por fuera, por que se puede ser más extraordinario por dentro.

martes, 29 de enero de 2008

Bat for lashes: Natasha sabe lo que una chica tiene que hacer

Bat for lashes es un grupo compuesto por cuatro chicas que han debutado en la escena británica en el 2007 con su álbum "Fur and Gold" y que ha sido nominado al prestigioso Mercury Prize, compitiendo con artistas de la talla de Awy Winehouse y The Klaxons.

La voz del grupo, Natasha Khan, en la onda de Bjork, Feist o Beth Gibbons de los Portishead, es agresivamente angelical en canciones como "Trophy", "Horse and I" o el fantástico single de presentación "What´s a girl to do" y mágica en "The wizard" y "Prescilla".

La música destaca por sus maravillosas orquestaciones que se funden con bases electrónicas e incluso palmas
recordando, como he comentado antes, a la Bjork del Post, e impregnando todo el trabajo de un aire misterioso, fantástico, bucólico y sórdido en muchos momentos.

Un grupo al que hay que seguir la pista y un disco muy a tener en cuenta que podría ser la banda sonora de los sueños más maravillosos, y de los más oscuros.

Juno: las cuatro estaciones de un embarazo

Los Oscar todos los años dan una sorpresa nominando a una película que nunca entraría en las quinielas de los más entendidos, por que no es de un director de renombre, ni tiene a unos actores supertaquilleros, ni siquiera un argumento políticamente correcto. Este es el caso de "Juno", película de Jason Reitman (director de la interesante "Gracias por fumar") que gira en torno a todo lo que desencadena el embarazo (no) deseado de una peculiar adolescente (fabulosa Ellen Page nominada al Oscar) que ha crecido en el ambiente de una familia desestructurada.

Ya desde los títulos de crédito, de estilo comic, y desde el comienzo de la cinta, vemos que no es un drama al uso ni una comedia adolescente, y que lo que podría parecer una tragedia, la protagonista lo afronta con un cinismo (en ocasiones extremo) y una madurez impropios de una chica de 16 años.

Todos los personajes de la cinta rozan la extravagancia, un padre y una madrastra, obsesionada con los perros, muy comprensivos, una amiga que fantasea con profesores maduros nada atractivos, el padre adoptivo con complejo de "Peter Pan" (Jason Bateman) que no quiere renunciar a sus sueños de adolescencia y su mujer obsesionada con ser madre (Jennifer Garner), el novio adicto a los caramelos "tic tac" de naranja y, como no, una adolescente, más perdida de lo que cree, que va a contracorriente.

Todos los actores bordan sus papeles, haciendo especial incapié en Ellen Page y en Jennifer Garner, probablemente su mejor papel hasta la fecha, que protagonizan la parte más humana y emotiva de la película.

"Juno" es una, por momentos, ácida historia sobre el ideal de familia, la que Juno le quiere dar a su hijo, sobre el ideal de amor como algo que dura para siempre, sobre aquellos adultos que no quieren crecer y sobre aquellos adolescentes que se ven obligados a hacerlo rápido, y lo consiguen. Éste es el eje de la película, el crecimiento personal de Juno, el momento en que deja de ser una adolescente rebelde y cínica y empieza a tener fe en la humanidad, en sí misma y en el amor aunque empiece la casa por el tejado.

lunes, 28 de enero de 2008

aAron: Melancolía Electrónica desde Francia

El dúo francés formado por Simon Buret y Olivier Coursier han sido la revelación del 2007 en su país natal por su primer trabajo "Artificial Animals Riding on Neverland" y gracias a su primer single "U turn (Lilli)" que te pega en el estómago con su desgarradora letra, te llega al corazón a ritmo de piano y violín y te engancha con una impecable base electrónica.

El disco lo abre la efectiva "Endless song" en la que la voz de Simon susurra frases como" I use to be someone happy" y continua con joyas como "Mister K" ,"Angel Dust" o "Lost Highway. Un total de 13 cortes oscuros, románticos, elegantes, que dotan de sonido a la tristeza, a la soledad y a la melancolía.

La voz de Simon Buret es totalmente hipnótica, arrastra algunos versos hasta casi el llanto y el piano de Olivier la acompaña consolándola. Thom Yorke ( Radiohead) y Chris Martin( Coldplay) tienen a dos alumnos aventajados en este dúo y seguro que tienen éste disco entre sus favoritos, y si no es así, es por puro ego de artista.

"ONCE" OTRO ESTILO DE MUSICAL

Mi primera recomendación es un musical diferente, como no habíais visto antes, y no me refiero a algo en la línea de "Moulin Rouge" o de "The Rocky Horror Picture Show", entendidos como musicales "diferentes", ni en la línea de clásicos como "West side story" o "Grease" con números grandilocuentes y coreografías imposibles.

En su segundo largometraje, John Carney nos cuenta la historia de amor de chico conoce a chica que utilizan su pasión por la música para enamorarse hasta la médula. Hasta aquí la hemos visto todos, e incluso podría decir que si a ese chico y a esa chica las situamos en un instituto de secundaria americano podría estar hablando de cierto e inexplicable fenómeno musical de Disney que me ha atormentado el último año.

Pero, ¿por qué "Once" (Una vez) es un musical diferente?. Por que es una película independiente que se desarrolla en Dublín, con actores desconocidos, con contenido social y con una historia de amor, latente durante todo el metraje, de las de miradas y silencios que conmueven. Los protagonistas Glen Hansard , líder del grupo The Frames, y Marketá Irglová, cantante checa, utilizan la música para escapar de una realidad que no les es favorable pero que afrontan positivamente en su día a día. Como musical que es, las canciones son un personaje más de la trama que conducen el hilo argumental.

Y es ahí donde la película juega su mejor baza, las canciones son intimistas y emotivas, en el rollo de Coldplay o Damien Rice, y revelan detalles del atormentado pasado de los protagonistas y del esperanzador futuro, en ellas ponen los personajes toda su alma y se dicen todo lo que de otra manera no se dirían, es por eso que recomiendo que se vea con subtítulos.

La película toca la fibra sensible sin empeñarse en ello y por eso creo que está siendo el fenómeno boca a boca del año como ya le ocurrió en su momento a películas como "Amelie" o "Mi vida sin mí", que llegaron a un número grande de espectadores sin mucho marketing ni distribución.

Si Ken Loach, abanderado del cine independiente social inglés hubiera rodado un musical, ese sería "Once".